Los incendios de Siberia y Alaska están derritiendo el Ártico
Más de 100 incendios forestales de gran intensidad y larga duración se han registrado desde principios de junio en zonas árticas. El motivo no es otro que las devastadoras olas de calor. Como otras zonas del planeta, regiones árticas como Siberia y Alaska viven este verano de 2019 uno de los más calurosos y secos de la historia.
Incendios desoladores que han alcanzado dimensiones equivalentes a las de 100.000 campos de fútbol o, por ejemplo, la extensión de la isla de Lanzarote, según el Servicio de Vigilancia de la Atmósfera del programa Copernicus (CAMS). El último informe de la Organización Meteorológica Mundial, (julio 2019), asegura que el hemisferio Norte registra en lo que llevamos de verano “unas condiciones atípicamente calurosas y secas que han desencadenado importantes incendios desde la zona del Mediterráneo hasta la región ártica, la cual se ha visto especialmente afectada”.
El devastador bucle climático
Llamas alimentadas por las altas temperaturas registradas que provocan la emisión a la atmósfera de grandes cantidades de gases de efecto invernadero. Entramos una vez más en un bucle nefasto para la salud del Planeta; la combustión de masa forestal provoca la emisión a la atmósfera de dióxido de carbono, uno de los gases que incrementa el efecto invernadero y, por tanto, agrava la crisis climática que está cada día azotando a la Tierra. Otro dato alarmante viene de nuevo de la mano de la CAMS. Solo en el mes de junio, estos incendios emitieron 50 megatoneladas de dióxido de carbono en la atmósfera. Una cifra que equivale a las emisiones anuales totales de Suecia.
La fragilidad del medio ambiente ártico
Debido a esta cascada de fuegos, 400 en lo que va de año solo en Alaska, el frágil medio ambiente ártico esté experimentando un calentamiento más rápido que la mayoría de las regiones del planeta. Las temperaturas hablan por sí solas. El día 4 de julio se registraron nuevos récords de temperatura en Alaska, donde se alcanzaron 90 °F (32 °C). La temperatura media en las zonas de Siberia azotadas por los incendios forestales fue 10 °C más alta que la media del período 1981-2010.
Olas de calor que dan lugar a estos incendios forestales y aceleran el deshielo en el Ártico. Además, partículas de humo pueden depositarse sobre la nieve y el hielo, que absorben la luz solar que, en otras circunstancias, se reflejaría. Como resultado, se acelera el calentamiento en la región ártica. Los incendios en esa región también incrementan el riesgo de un mayor deshielo del permafrost, lo que libera metano, otro gas de efecto invernadero.
El impacto del cambio climático se ve a escala mundial. Según un estudio reciente, los bosques boreales de la Tierra se están quemando a un ritmo sin precedentes desde hace al menos 10.000 años. Es hora de reflexionar y sumarse a la lucha contra el cambio climático.
Y tú, ¿realmente a qué esperas?
Stop Cambio Climático
En 2016 la Tierra vivió su año más cálido desde que hay registros. Un récord que lejos de celebrarse se debe combatir con esfuerzo y responsabilidad por parte de todos. STOP CAMBIO CLIMÁTICO es un espacio para remover conciencias y ofrecer consejos útiles y fáciles de llevar a cabo para ser respetuosos con el medio ambiente. Toma conciencia de la importancia que tiene cuidar nuestro planeta y nuestros recursos naturales.
